Carlos Libidinksy y su grupo traerá un ‘show’ escénico,
lo mejor de su primer trabajo y, además, presentará su más reciente
CD, ‘Narcotango 2’
Carlos Libedinsky recorrió el rock, el
blues y el pop hasta que, en 1992, se encontró de frente con el
tango.
Entre la melancolía de las milongas y el
porteño se creó una relación que fluía de manera normal –hizo parte
de un dúo llamado Los Mareados, con el que tocaba un repertorio
clásico– hasta que un día experimentó una sensación
extraña.
Este argentino, que también sentía un
gran interés por la corriente de electrónica que sonaba en el
momento, sentía ganas de bailar tango cuando oía el 'trip hop' de
Massive Attack y la música de Björk o de Saint Germain.
¿Qué
tenía que ver un sonido con el otro? ¿Por qué los 'beats'
que prendían las fiestas de los clubes europeos lo remitían a
la nostalgia de una milonga? De la respuesta a esas dudas nació
Narcotango, un proyecto musical que el mismo Libedinsky definiría
como “un abrazo profundo entre el tango y la atmósfera musical
electrónica de nuestro tiempo”.
¡Traición!, gritaron muchos
tradicionalistas. Pero ya no había nada que hacer frente a aquella
“mixtura” que emergía desde Buenos Aires. Lo que algunos han llamado
el ‘tango del siglo XXI’ se abría paso y, junto a Narcotango, otros
grupos como Bajofondo Tangoclub, Tanghetto y Gotan Project mezclaban
bandoneones con scratches y violines 'beats'.
Sin embargo, para Libedinsky una de las
cosas que caracteriza el trabajo de su grupo es que “la electrónica
en Narcotango es un instrumento más, no es el aspecto central de su
música como sí lo es, por ejemplo, en Bajofondo
Tangoclub”.
De Buenos Aires a Bogotá
Hace pocos días, lanzaron su
segundo trabajo discográfico en Argentina, 'Narcotango 2', y el
jueves primero de junio llegan a 'Downtown 7-27' para
inyectarles a los capitalinos una dosis de su tango narcótico que
busca penetrar los sentidos mediante la música y una puesta en
escena que complementa lo auditivo con lo visual.
Una pareja de bailarines recogerá los
pasos de las tradicionales milongas bonaerenses, un bailarín de
break dance y hip hop mostrará cómo se baila un tango con texturas
electrónicas y una acróbata aérea bailará sobre la cabeza de los
músicos.
Todo esto mientras los sonidos del
bandoneón, el violín, la batería, los teclados, el piano, el bajo,
la guitarra (interpretada por Libedinsky) y la voz de Rosana Laudani
demuestran porque el tango “es como una droga que nos genera una
increíble, sensual y poderosa adicción”, tal como lo afirma
Libedinsky. Después de visitar Bogotá este grupo irá a Quito, Chile
e iniciará una gira de 40 días en Europa.
Las novedades
Sabemos que la relación entre Colombia y
el tango es de amor y viene desde hace tiempo. Esperamos
corresponder a ese sentimiento”, dice Libedinksy.
Por eso traerán un ‘show’ escénico, lo
mejor de su primer trabajo y, además, presentarán su más reciente
CD, ‘Narcotango 2’. El trabajo trae 10 cortes y, como ‘bonus track’,
un video del grupo tocando en vivo el tema del primer disco ‘Vi luz
y subí’.
Ellos traerán varias copias de este nuevo
trabajo que, por ser tan reciente, aún no se consigue en el
país.
Narcotango en concierto
Jueves primero
de junio, 8:00 p.m.
Downtown 7-27.
Carrera 7 No. 27-46.
Venta de boletas en Tuboleta:
5936300.
Luisa Diaz
luidia@eltiempo.com.co